Aprovechando que la casa de Brighton tenía bañera me aventuré a probar una de las famosas bombas de baño de Lush y he de decir que he quedado totalmente encantada.
En este caso me decidí a comprar la bomba Think Pink principalmente por ser la más económica que encontré pero he de decir que su olor dulce me encantó desde el primer momento.
Ya una vez de haberla probado lo que me ha enamorado de esta bomba de baño es lo rápido que se disuelve, sin dejar ningún residuo ni teñir la bañera o la piel. Tiene un olor dulce y relajante y deja corazones pequeños en el agua lo que me ha parecido ideal para algún momento especial. A parte de estos beneficios que pueden sonar a tópico está compuesto por dos aceites que tonifican y calman la piel dándole un extra de hidratación y suavidad que no viene mal para esta época donde lucimos más nuestra piel.
Os dejo el link directo para que la podáis conseguir, ¡Nos vemos en el próximo post!
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